«¿Qué aprendiste hoy?» Es una pregunta que me hago todas las noches en mi conversación con la almohada, y no en vano. Intento rescatar por lo menos un nuevo conocimiento que haya adquirido durante el día.
Puede ser un conocimiento técnico, una experiencia personal, un detalle interno sobre mi personalidad, sobre cómo veo el mundo o mismo como me relaciono… cualquier cosa cuenta, pero algo tiene que haber. Eso sí, de ser una reflexión interna, algún aprendizaje debo de extraer.
Hoy, por ejemplo, hice una reflexión sobre los procesos y lo que conllevan. ¿En qué partes se pueden dividir todos los procesos en líneas generales? ¿Cuáles son las partes más desafiantes o intimidantes? ¿Qué debo mejorar lograr que los diferentes procesos en mi vida tengan un impacto positivo a lo largo del tiempo? Saqué muchas conclusiones, de las que seguramente escriba en otro post.
Este pequeño detalle, llevar a la conciencia algo que aprendí en el día, me deja descansar tranquilo sabiendo que soy algo mejor que ayer. Además, llevarlo a la mente me ayuda a procesarlo mejor y seguir analizándolo, para que se aferre todavía más y realmente se fije en mi memoria.
Y vos… ¿QUÉ APRENDISTE HOY? 👇 ¡Te leo!