Vender, ¿Por qué es Importante?

«No sirvo para vender«, dicen. «Las ventas son difíciles«, agregan. «¿Para qué quiero saber vender?«, concluyen.

Podría parecer una habilidad poco importante. Pero analicemos lo que significa.

Es algo que va más allá de emprendedores y dueños de negocios. De hecho, es algo que todo el mundo debería saber hacer. Las ventas permiten crecer a uno. ¿Por qué?

En el caso de los comerciantes es indudable: necesitan saber hacer plata. Desarrollarse para vivir. Lo mismo sucede con aquel que busca crecer un emprendimiento.

En otros casos es menos evidente. Sin embargo, es algo que la gente hace constantemente. Puede ser que no lo haga con un producto en sí. Entonces, ¿Qué es lo que suele venderse en la vida cotidiana?

Pongamos ejemplos:

• Buscas ser admitido en una beca (de cualquier índole). Que te elijan ante otros. Te estás vendiendo.
• Salís con una persona que conociste en Tinder y te interesa. Quieres que la otra persona te «compre». Te estás vendiendo.
• Presentas el CV para postularte a un puesto de trabajo. En el CV seguramente figure lo mejor de vos. ¿Por qué? Porque te estás vendiendo.
• Te llaman a una entrevista porque gustó tu CV. Vas a demostrar tus habilidades comunicativas y tratarán de conocerte más. Y vas a tratar de demostrar que lo vales. Te estás vendiendo.
• ¿Entiendes a que me refiero? Es porque te vendí la idea… o la compraste.

No importa si estás vendiendo un producto, servicio, a vos mismo (como en los ejemplos anteriores), a tu socio, una opinión… Se trata de que otra persona (o personas) elijan o compren lo que ofreces.

¿Cómo puedo aprender a vender?

Muchos creen que se nace buen vendedor, cuando en realidad se hace. A algunos les puede resultar más fácil, pero esto no quita que otros puedan aprender también.

Algunos consejos que podría dar sin ahondar mucho en el tema (Seguro los desarrolle en otro post), son:

1. Socializar. Hablar con más gente y ver que los otros seres humanos también son personas como uno, de carne y hueso. No muerden.
2. Leer. Aunque suene raro o desacertado, leer puede dar confianza suficiente como para desenvolverse posteriormente en una conversación.
3. Conocer el producto. Saber las fortalezas de lo que uno está recomendando.
4. Creérsela. Hay que estar convencido de que lo que uno ofrece es lo mejor que puede recibir. Con confianza y humildad. Nunca con soberbia.
   • Si no estás convencido, te recomendaría que mejores lo que ofreces. Si te estás vendiendo para un puesto de trabajo pero dudas de vos, hay dos opciones: O te estás presentando al puesto equivocado, o tenés que mejorarte, desarrollarte y cultivarte más.
5. Vender. Y hacerlo de manera consciente. La práctica hace al maestro, dicen.

Tendrás que vender aunque sea algo que no te hayan enseñado en el colegio. Como muchas otras cosas que tampoco te enseñaron. Por esto afirmo que se aprende hasta el último día de tu vida, no solo en la etapa estudiantil.

Te recomiendo que visites el post en donde hablo sobre la importancia de aprender de por vida. ¡Éxito en tus ventas!